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La Alpujarra se posiciona como un territorio con un gran potencial para el desarrollo de un modelo turístico sostenible, capaz de dinamizar su economía local y afrontar desafíos como la despoblación y la falta de oportunidades laborales. La valorización del patrimonio cultural, la identidad gastronómica y los productos locales constituye una base sólida para diversificar la oferta y atraer un turismo más especializado y de calidad. La apuesta por un turismo ligado a la sostenibilidad, la innovación y la creatividad permite avanzar hacia la desestacionalización y la cohesión territorial, fomentando nuevas formas de actividad económica en entornos rurales en regresión.
Las principales tipologías de actuación contenidas en esta línea referida a los sectores económicos son: - Impulso a la producción local, la artesanía y el comercio de proximidad. - Creación y consolidación de marcas de identidad territorial. - Revalorización del patrimonio cultural y natural como motor económico. - Desarrollo de un modelo turístico inteligente, sostenible y experiencial. - Dinamización cultural y promoción de eventos con impacto económico.
DEBILIDADES DETECTADAS - La visibilidad turística de la Alpujarra sigue siendo mayoritariamente regional o nacional, con escasa presencia estructurada en canales turísticos globales. - Sector hotelero mayoritariamente tradicional, poco modernizado y concentrado en unos pocos municipios, lo que dificulta su competitividad y visibilidad.
- Ampliar la visibilidad global de la oferta turística y comercial - Valorizar y visibilizar el potencial de los productos locales y las marcas de calidad vinculadas al territorio. - Profesionalizar y modernizar el sector del turismo rural y los alojamientos turísticos.
- Aprovechar las potencialidades del turismo de naturaleza, cultural y experiencial como motor de desarrollo económico equilibrado.
